El lloriqueo de Karime Macías se comienza a escuchar

Karime
Karime Macías Tubilla FOTO: WEB

Los veracruzanos, durante 12 años fuimos rehenes de grupos de poder confabulados. A la cabeza del poder estuvieron personas sin escrúpulos, que sólo pensaron y maquinaron maquiavélicamente como poder robar los millones de pesos que eran destinados para los más necesitados. Aquéllos viven en verdadera miseria. La triangulación y desvió de recursos, a través de empresas fachada, llamadas propiamente fantasma, fue resultado de una mente perversa, insana, una mente que sólo quería nadar en la opulencia y en la abundancia.

Esta mente se repetía constantemente «merezco abundancia», como si sus méritos fueran un privilegio para el pueblo. Karime Macías en verdad creía que se merecía tener el dinero a manos llenas. Esta mujer, considerada muy “mona” por algunos funcionarios que trabajaron a su lado, creyó que el destino no la alcanzaría. Hoy Karime, la niña bien, vive al filo de la angustia, sabe que, en cualquier momento, la Fiscalía veracruzana le pueden fincar responsabilidades.

Hoy esta mujer radicada en el viejo continente europeo, no se ha podido borrar la marca que lleva en la frente, la marca de Caín. Aquella marca, que huele a estafa, a dinero mal habido. Tenga la certeza que, a donde quiera que se presenta y es reconocida, inmediatamente se logra escuchar el cuchicheo de las lenguas de doble filo, tachándola de esposa de un preso, un recluso que cada día que pasa, alcanza a ver que no será tan fácil salir de prisión, como se lo prometieron sus amigos del alma.

Todos los derechos reservados. Este material no puede ser publicado, reescrito o distribuido sin autorización.

Comentarios

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *