Filiberto Vargas Rodríguez /
Prefacio.
Ya se había anticipado aquí: El aún dirigente estatal del PRI, Renato Alarcón, fue –por decir lo menos- “imprudente” al dar como un hecho que el Partido Nueva Alianza irá como aliado en la contienda por la gubernatura de Veracruz. *** Puede ser que así se dé, pero en estos momentos no hay acuerdo alguno, y dar por hecho que la alianza se dará en Veracruz puede ser tomado como una falta de respeto. *** Este martes la dirigente estatal del Panal, Mérida Mar Domínguez, le pidió a su par del PRI que “no se adelante” y espera que concluyan, en primer término, las negociaciones a nivel nacional, para pasar después a los acuerdos en los estados. *** Nueva Alianza tuvo un extraordinario repunte en las elecciones municipales de este año, sumando más de 200 mil votos, cifra muy atractiva para cualquier aspirante a la gubernatura, pero la decisión sobre una eventual alianza aún está lejos.
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Miguel Ángel Yunes miente.
Y lo hace con total aplomo, con plena desfachatez. Lo hace como alguien que ha mentido toda la vida y se ha vuelto un experto en la materia.
Lo mencioné ayer pero ya lo había anotado en ocasiones anteriores: Miguel Ángel Yunes Linares y Fidel Herrera Beltrán son lo mismo. Están cortados con la misma tijera. Los dos se obsesionaron por alcanzar la gubernatura de Veracruz, los dos amasaron extraordinarias fortunas a partir de su paso por diversos cargos en el servicio público. Los dos basan su actuación en la mentira.
Alguna vez lo dije de Fidel Herrera, pero también describe a Yunes Linares: Ambos recurren con extraordinaria frecuencia a la mentira, pero explotan cuando se les tacha de embusteros. Saben bien que para que la mentira tenga efecto, es menester tener credibilidad. Si la fama de mentirosos se arraiga en su entorno, la mentira no les funcionará.
Yunes Linares miente cuando, como este martes, asegura que no metió las manos en el proceso electoral municipal de este año. La elección de su hijo Fernando es el mejor ejemplo del uso del aparato estatal para impulsar una candidatura. La consigna que todos sus colaboradores tienen, de que habrán de mantenerse en el poder por 14 años, demuestra su grotesca injerencia.
Yunes Linares miente cuando habla de que ha respetado la autonomía de los otros dos poderes (el Legislativo y el Judicial).
Con el primero ha comprado, con dinero o mediante amenazas, la voluntad de varios legisladores que, o se han sumado a la bancada azul, o desde sus posiciones respaldan toda iniciativa del gobernador.
El segundo, el Judicial, acata ciegamente toda instrucción del mandatario estatal. La reclusión de exfuncionarios duartistas, señalados por delitos que pueden ser defendidos desde la libertad, es la muestra más clara de ello.
Ambos, Legislativo y Judicial, habrán de avalar un Sistema Anticorrupción a modo.
Yunes Linares miente cuando pretende hacer creer que es “una obligación” de los alcaldes electos -y que entran en funciones hasta el primero de enero del 2018- acudir a sus convocatorias. Ellos no tienen cargo alguno, por lo tanto, ninguna autoridad para signar convenios “posfechados”. Él lo hizo cuando fue a extorsionar a los socios de Javier Duarte para obligarlos a regresar dinero mal habido, pero él mismo admite que no tenía fuero alguno, ni autoridad con la que pudiera sustentar sus gestiones.
Miente el gobernador de Veracruz cuando amenaza –de forma reiterada y grosera- a cuatro alcaldes electos de Morena, con retirarles, no sólo el apoyo de las corporaciones estatales, sino incluso de las federales. Él no dispone a su arbitrio del Ejército, la Armada o la Gendarmería. Él no puede asignarlas o retirarlas.
Miente Yunes Linares cuando asegura que se encontró con un déficit en el presupuesto estatal de 20 mil millones de pesos y que él ya lo redujo a seis mil millones. El rezago era más cercano a los 10 mil millones de pesos, por lo tanto su “ahorro” ha sido mínimo, pues contrató más gente de la que despidió y con salarios más altos. ¿O acaso alguna vez ha mostrado algún balance serio, creíble, que demuestre su dicho?
Miente cuando nos trata de convencer de que la violencia y la inseguridad son culpa de quienes gobernaron antes que él, o responsabilidad de la Federación. Miente cuando mete en la misma bolsa todos los delitos que se cometen y los convierte en “incidencia por cada cien mil habitantes”.
Mintió cuando, a cambio de sus votos, les prometió a los veracruzanos que en seis meses volvería la paz a Veracruz. Mintió cuando se comprometió a colocar al frente de la Secretaría de Seguridad Pública a un militar, y cuando sustituyó al “fiscal-carnal” de Javier Duarte, por su “fiscal-lacayo”.
Miente cuando presume de que no ha habido casos de corrupción en su primer año de gobierno, pues pasa por alto los señalamientos por abuso de influencia en la Secretaría de Salud, o los actos de corrupción en la Academia de Policía de El Lencero, que provocaron un movimiento de protesta de los cadetes y el cese y procesamiento de su director, Julio César Sosa Mirós.
Evita hablar, también, de la irregular ampliación de la concesión para las casetas de peaje de Dos Ríos y La Antigua, que le permitió cobrar un recurso que no le correspondía a su gobierno y que favoreció a un grupo empresarial que ha sido el principal patrocinador de su carrera política, los Ruiz Ortiz.
¿Ya explicó, acaso por que volaba en un helicóptero de los Ruiz cuando fue a enfrentar a los saqueadores de una plaza comercial en Veracruz?
¿Cuántas veces ha viajado a la ciudad de México y cuántas de ellas han sido en vuelos comerciales? Al inicio de su gestión fue visto cuando esperaba abordar un vuelo comercial a la capital del país y explicó que era “carísimo” utilizar las naves aéreas del estado. ¿En qué se traslada ahora?
Por cierto, en el primer año de Javier Duarte tampoco se presentaron denuncias de corrupción y ya ven cómo terminó.
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Epílogo.
La Comisión de Hacienda en el Senado, que encabeza Pepe Yunes, y la de Estudios Legislativos Primera, aprobaron este martes el dictamen a la minuta que reforma, adiciona y deroga diversas disposiciones de la Ley de Disciplina Financiera de las Entidades Federativas y los Municipios. Fueron reformados 15 artículos y se hicieron cinco adiciones a la ley, para otorgar mayor certidumbre a los estados en la elaboración de sus paquetes económicos; se amplía el destino de ingresos excedentes para que se establezcan usos diferenciados y se premia a las entidades con buen desempeño en su endeudamiento. El dictamen establece un cinco por ciento de los excedentes para que se destinen a gasto corriente, de manera permanente a partir del 2019, además de brindar facilidades para atender de manera ágil las necesidades de las entidades derivadas de desastres naturales. Se incluyeron además figuras no contempladas por la ley, como proyectos de prestación de servicios o cualquier esquema similar de carácter local, mismas que tendrán que transparentarse en el registro público único y cumplir con los requisitos de ley. Prevé plazos para la presentación de solicitudes de inscripción en algunos casos especiales para que se otorgue certeza jurídica a los entes públicos y se realizan adecuaciones en materia de alertas para mejorar su operatividad. *** Los alcaldes electos de Morena, esos que fueron objeto del “regaño” del gobernador y de la amenaza de que no los apoyarán en materia de seguridad, habrán de reunirse este miércoles con el Comisionado Nacional de Seguridad Renato Sales Heredia. ¿Qué haces cuando en el camino a tu casa te encuentras con un perro bravo que amenaza con atacarte? Lo evitas, tomas otra ruta. *** ¿Así o más claro?
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