Vaya, vaya, resulta que a pesar de los esfuerzos que ha hecho el Gobierno Federal, el problema de los huachicoleros en lugar de disminuir ha aumentado. El director de Pemex, José Antonio González Anaya, declaraba que sus informes mostraban una disminución en el robo de combustible y que miles de huachicoleros habían sido aprehendidos.
Según él, la disminución del robo de combustible se había dado gracias a que «existe una estrategia de coordinación en la que semanalmente se reúnen los titulares de Pemex, PGR y SHCP para hacer una revisión del tema, en el que se ha privilegiado el seguimiento al comportamiento del consumo en gasolinas como factor estratégico». Pero las cifras no mienten, en 2017 los huachicoleros hicieron más perforaciones en la red de ductos de Pemex que en 2016.
Fueron siete mil 642 perforaciones al año. El estado donde más operan estos ladrones de combustible es Guanajuato con mil 393 perforaciones al año, de ahí siguen Puebla, con mil 92; Tamaulipas, con 880; Veracruz, con 769; Hidalgo, con 727; Estado de México, con 726, y Jalisco, con 401.
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