Guillermo Moreno Chazzarini no debe olvidar que es un funcionario público y como tal debería comportarse. Jugar al peleador callejero sólo porque cuestionan el manejo de las cuentas bancarias en su dependencia no es lo que se espera de un funcionario de su nivel. Ignorante le dice al presidente de la Comisión de Hacienda del Senado, lo vincula a gobiernos corruptos y lo llama cómplice de Fidel y de Duarte; eso no es cierto, y si Chazzarini lo afirma, entonces el ignorante es él.
La respuesta de Pepe Yunes a este funcionario bully era lo que se esperaba de él. El senador exhorta a que se presenten «los estados de cuenta bancarios certificados por las instituciones financieras que albergan cada una de las cuentas de los Fondos Federales recibidos por el Estado de Veracruz exhibiendo sus saldos del 1ro de diciembre de 2016 al día 8 de septiembre del 2017, para demostrar que no incurrieron en desvíos de recursos».
En ningún momento el senador responde a la agresión verbal, pues como bien dice: «No me agravia la ofensa ante la falta de respuestas». Ya que los dos son funcionarios públicos aquí se podría aplicar el dicho: «Aunque somos del mismo barro, no es lo mismo bacín que jarro».
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