Juan David Castilla Arcos / Xalapa, Ver. Las desapariciones forzadas en Veracruz continúan en aumento por el reacomodo de plazas criminales y el nexo de delincuentes con los gobiernos.
Así lo denunció Sara González Rodríguez, integrante del Colectivo por la Paz, quien añadió que la intervención del subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación (Segob), Roberto Campa Cifrián, no ha beneficiado a los familiares de desaparecidos, toda vez que «sólo defiende a los delincuentes».
«Cada gobierno trae a sus propios asesinos, a sus propias mafias, es feo decirlo pero están atacándose unos a otros, porque quieren la plaza y esta plaza es muy buena, hay mucha gente culta, inteligente, trabajadora, hay mucha gente buena, desgraciadamente, mientras el gobierno no haga su trabajo como debe de ser esto a seguir».
Un grupo de familiares de desaparecidos protestó frente a Palacio de Gobierno durante el Día Internacional de Víctimas de Desaparición Forzada.
En el lugar, la representante de los quejosos acusó que este gobierno panista, que encabeza Miguel Ángel Yunes Linares, ha sido el peor en la historia de Veracruz, en materia de desapariciones forzadas, toda vez que el número de casos aumentó exponencialmente y ninguna persona ha sido localizada.
«Llegó Yunes y empezaron a desaparecer niños y adolescentes, es un fenómeno que desgraciadamente se da porque todos sabemos lo que es ese señor».
González Rodríguez recordó que sólo en Xalapa se han registrado hasta siete desapariciones forzadas al día.
«Este gobierno está peor que todos, tenemos más desapariciones porque en tan corto tiempo ha habido más que en tanto tiempo de los sexenios pasados».
La entrevistada repudió las recientes declaraciones del Gobernador del Estado donde criminaliza a las víctimas para deslindarse de sus responsabilidades y evitar las investigaciones correspondientes.
«Dice que todos los que están matando ahorita es porque están metidos en la delincuencia organizada o les llaman pederastas o les llaman violadores, para no hacer una propia investigación y culparlos, ellos se lavan las manos. Qué desagradable que de un gobernador vengan esas palabras y que diga que están metidos con la delincuencia organizada», remató.
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