En Veracruz no hay ladrones, puros herederos

Spinoso
Xalapa, Ver. Édgar Spinoso Carrera Foto: Miguel Angel Carmona/FOTOVER.
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Armando Ortiz / Ahora resulta que ninguno es ladrón, que todos son herederos, bueno hasta Javier Duarte lo será una vez que muera su íntimo amigo Moisés Mansur Cisneyros. Gina Domínguez es lo que alegó en algún momento, que buena parte de su fortuna la había heredado. Lo mismo Javier Duarte, que en su 3 de 3 dijo que le habían heredado dos casitas y dos carritos. Gabriel Deantes no heredó, pero su cuñada de manera muy solidaria le donó 2 millones 500 mil pesos, aunque no extrañe que al rato también va a tener un documento de herencia firmado por algún notario público. Ahora sale Edgar Spinoso con la historia de que buena parte de su fortuna, él no quiso decir cuánta, es heredada por su padre César Spinoso. Sobre los señalamientos que se le hacen de haber operado el saqueo de las arcas de Veracruz desde la Oficialía Mayor de la Secretaría de Educación de Veracruz, el diputado federal se deslinda de todo, asegurando que no conoce a dichas empresas, que no tiene nada que ver con ellas a pesar de que las pruebas muestran que a muchas de estas las favoreció con contratos millonarios. Édgar Spinoso fue destituido de la Oficialía Mayor de la SEV, según informes que el gobierno de Duarte filtró, fue por faltar a la confianza del gobernador. Algo le ha de haber regresado a Duarte que a unas semanas de correrlo ya lo estaban abrazando de nuevo. Acostumbrado a devolver cosas, ¿cuántos aviones y propiedades habrá regresado Spinoso para comprar su impunidad?

¿En qué se parece Xóchitl Tress y Gina Domínguez? Las dos ocuparon Serene SA

Gina Domínguez, la llamada “vicegobernadora” en el sexenio de Javier Duarte, utilizó diversas empresas fachada, las llamadas empresas fantasma, para hacer pagos a medios de comunicación de su preferencia. De acuerdo con las investigaciones la exvocera solicitó de manera irregular órdenes de pago a favor de una docena de empresas, entre estas estuvieron Negocios Serene SA de CV y Morgaver SA de CV, las cuales ya estaban detectadas por el SAT como fraudulentas. En la investigación que se le sigue a Xóchitl Tress se ha descubierto que la supuesta amante compró una residencia en Veracruz a través de una empresa fantasma llamada Grupo Comercial Terrami. Pero poco después de la compra se quiso también adjudicar de los terrenos que estaban al lado de su residencia, para lo cual utilizó a otra empresa fantasma llamada Negocios Serene SA de CV, sí, la misma que utilizaba la madame Gina. Al parecer entre los miembros del gabinete de Javier Duarte se rolaban las empresas fantasma para cada uno hacer su negocio. Las direcciones de estas empresas, como ya se ha reportado, muchas veces son de patios de vecindad o cuarterios, y los socios personas engañadas a las que les pagaban 200 pesos para que dieran sus firmas.

¿Qué son esos servicios personales a los que se refiere el Dr. Ragueb Chaín?

El Dr. Ragueb Chaín, entrevistado por la Junta de Gobierno de la UV señaló que “los servicios personales (en la UV) se han disparado de manera impresionante y tenemos que encontrar una forma de evitar el crecimiento de los recursos personales para las cuestiones sustantivas”. De acuerdo con datos que el mismo Ragueb Chaín mostró, el 88% del presupuesto de la Universidad Veracruzana se va en gasto para “servicios personales”, mientras que sólo queda el 12% de ese presupuesto para gastos operativos. ¿Qué son esos servicios personales a los que se refiere el Dr. Ragueb Chaín, aspirante a la rectoría de la UV? El concepto “servicios personales” se refiere a las remuneraciones del personal al servicio de los entes públicos, tales como sueldos, salarios, dietas, honorarios, prestaciones, gastos de seguridad social, obligaciones laborales y otras prestaciones derivadas de una relación laboral. Con esto podemos entender que el problema de la UV no está en el presupuesto, sino en el manejo discrecional del presupuesto cuya responsabilidad recae en la rectora Sara Ladrón. Siempre lo advertimos en este espacio, Sara Ladrón tenía en Clementina Guerrero a su tapadera para hacer del presupuesto un pastelote que se repartían entre ella y sus secuaces.

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