Para Andrés Manuel López Obrador Veracruz es una plaza importante, sobre todo por los resultados de las elecciones pasadas, donde Morena se convirtió en una fuerza real. Por ello no son casuales las constantes visitas de López Obrador al estado de Veracruz. No obstante, sus giras de trabajo no han sido lo que él esperaba, sobre todo por la animadversión que el dirigente Manuel Huerta y el diputado Cuitláhuac García han provocado entre los militantes originales de Morena.
Hasta hace unos meses, cuando Morena sólo era una posibilidad, un ideal, cuando no se tenía idea de cómo se habrían de comportar los dirigentes y los diputados con poder, pues todos querían con Morena, el partido impoluto, incólume, virginal.
Ahora que los ciudadanos se han dado cuenta que los dirigentes de Morena se comportan como cualquier político de quinta, como cualquier depredador electorero, pues las personas se han desilusionado. Morena en Veracruz fue un gran fenómeno que en las próximas elecciones no se habrá de repetir.
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