El gobernador, entrampado y solo

Gobernador
Miguel Ángel Yunes Linares, gobernador electo del estado de Veracruz FOTO: FACEBOOK
- en Opinión

Édgar Hernández* /

¡Legisladores locales y el federal considerarían juicio político ante eventual ingobernabilidad!

A Veracruz se le pegó la alarma.

Vive en un estado de emergencia y transita entre lo inédito y lo imposible; entre lo increíble lo fantasioso; entre el enojo y el abuso de poder.

Hoy no hay duda que si Franz Kafka viviera en Veracruz sería un escritor costumbrista.

Y es que no acabamos de salir de la pesadilla transexenal de la Fidelidad cuando ya estamos hasta el cuello de la otra, el Yunismo… y eso que vamos comenzando.

¿Qué pasó?

Hay quien opina que nos cayó el chahuixtle. Hay, sin embargo, quien jura por ésta que es una maldición gitana la que se cierne sobre nuestras cabezas no sin antes darle señalado lugar al regionalismo y quedarnos con que traemos encima la maldición catemaqueña… ¡Que chingaos!

Como sea, nomás no la vemos llegar.

En tan solo cien días o a tan solo cien días de gobierno, la división, la lucha fratricida, la acelerada pérdida de la gobernabilidad y el autoritarismo son las constantes.

Por más que el señor gobernador Miguel Angel Yunes Linares demande a gritos y sombrerazos apoyo para hacer posible la reconstrucción de Veracruz, choca con paredes infranqueables.

No podía ser de otra forma.

En la forma está el fondo, dirían los clásicos. En el pedir está el dar y si en política no se privilegia la negociación imposible llegar a acuerdos.

Y es que si a los diputados del PRI, Miguel Angel Yunes les reclama su voto para la reestructuración de la deuda pública, pero horas antes de la votación mete a la cárcel a Flavino Ríos, pero además les adviertes que más de 300 ex funcionarios irán al fresco bote… y encima de todo amenaza con quitarles sus salarios –¡por ojetes!- pues lo más seguro es que te manden a la fregada.

Y si para hacer posible el sobado cuento de respeto a la división de poderes y la pluralidad legislativa llama a Morena a votar por el saneamiento de la deuda pública, pero horas antes le mienta la madre a Andrés Manuel López Obrador… pues igualmente como sucedió, lo mandaron a la fregada.

Y si a los empresarios en su propia casa les reclama que son unos corruptos beneficiarios del Duartismo y después les pide que se sumen a la causa del desarrollo de Veracruz, difícilmente puede esperar que no lo manden a la fregada.

Y si a la prensa veracruzana, a los moderadores de opinión y comunicadores –chafas y no chafas- les gritas que son ignorantes, que no les va a aflojar un clavo y que si quieren hablar bien de él lo hagan “pero no obtendrán retribución alguna” porque además ya tiene a sus voceros de lujo que son Televisa y en diario Reforma… pues lo más seguro es que no solo lo manden a la fregada, sino que nunca hablen bien de ti. Y no solo eso, los periodistas se mantendrán en vigilia día y noche para denunciar y hacer público el más mínimo error o corruptela. “Yunes se va el año próximo mientras los periodistas seguiremos aquí y si le pegas a uno le pegas a todos”, es el dicho de muchos por aquí.

Y así hasta el final.

Si Yunes no se disciplina, vaya, no pela al jefe del gabinete, Miguel Angel Osorio Chong y todas las jugadas se las quiere pasar de humo como fue el caso Flavino; si se da el lujo de regañar al Secretario de Hacienda, José Antonio Meade; si advierte incluso al presidente Peña Nieto que va a cimbrar a México con información que tiene guardada en bóvedas de seguridad que adelantan complicidades con Javier Duarte… ¿Qué puede esperar de ellos?

Si desprecia e insulta a los senadores –entre ellos a su primo hermano Héctor a quien le advierte que va a meter a la cárcel a su papá, hermanos y sobrino, así como desdeña a los diputados federales priistas ¿Usted cree que moverán desde la ciudad de México un dedo en su favor? Pues no. Lo van a mandar a la fregada.

Si le juega al vivo queriendo insertarse en la carrera presidencial ¿Qué dirán sus aliados del PAN?.. Si quiere imponer a sus cachorros y formar una dinastía sangrienta ¿Quién lo apoya?..

Y si hizo tratos en lo oscurito con Moisés Mansur, Janeiro y presuntamente con los traidores intocables de Vicente Benítez, Juan Manuel del Castillo, Gerardo Buganza, Ricardo García Guzmán, Luis Angel Bravo Contreras, Edgar Spinoso, Mota, Iván López Fernández, difícilmente la opinión pública seguramente pensará que ya nos hizo una fregadera y que será correspondido de igual manera.

Y cuando promete respetar empleos y salarios, pero despide a más de diez mil acusándolos de aviadores y duartistas, pero en la contraparte contrata a poblanos, oaxaqueños y centenares de improvisados e impreparados de Boca del Río a quienes cumplió darles empleo a cambio del voto… pues lo más seguro es que los despedidos y la burocracia en su conjunto lo manden a la fregada.

Y si para llegar a la silla promete y compromete a meter a la cárcel a Javier Duarte y los 69 conspicuos raterazos… y a cien días hace como que la virgen le llama ¿Cómo cree usted que los 5 millones 700 veracruzanos

en posibilidad de votar, le responderán en las urnas en junio del año próximo al cambio de gobernador?

El punto es que el señor Yunes se ha confrontado con tirios y troyanos.

Le ganó la víscera. Imperó su bipolaridad. Se perdió en el tiempo y el espacio y olvidó que en ocho meses 10 días, cuando salgan las convocatorias para el proceso de sucesión gubernamental previo al destape, empezará el declive, la perdida del poder y a mediados del año próximo ya no será nada cuando se proclame al nuevo gobernador electo.

Bien se dice que el poder ofusca a los inteligentes, pero a los tontos los enloquece y en Veracruz se observa enojo, desplantes, confrontaciones, abusos de poder y ofuscaciones sinfín.

Hoy la pregunta obligada a estas alturas del partido es ¿vale la pena otorgarle a Miguel Angel el beneficio de la duda con tal de llevar la fiesta en paz y evitar más vendettas?..

La respuesta la tiene el propio Miguel Angel.

Decía don Adolfo López Mateos que en México tener poder tiene todas las dichas, “salvo dos desgracias: una de ellas es que todos te dicen que eres un Dios, la otra es que terminan convenciéndote”.

Don Fernando solo decía que todo gobernante tiene que tener claro que ¡el poder es prestado!

Tiempo al tiempo.

 

*Premio Nacional de Periodismo

Todos los derechos reservados. Este material no puede ser publicado, reescrito o distribuido sin autorización.

Comentarios

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *