Llega Yunes Linares, pero no llega solo

Yunes
El gobernador Yunes y su gabinete FOTO: WEB
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Armando Ortiz / Confirmada (por el propio gobernador electo) como buena la lista del gabinete que publicara en exclusiva el periódico Notiver, sólo resta conocer a aquellos que estarán en las diferentes subsecretarías y direcciones del gabinete del nuevo gobierno. Hasta el momento la lista no muestra grandes sorpresas, sobre todo porque ya sonaban muchos de los nombres anotados ahí. Se sabe que son muchos los que están cabildeando para encontrar un lugar en el gobierno de Miguel Ángel Yunes Linares, algunos de estos suspirantes tienen los peores antecedentes, pero aun así suspiran, esperando que en algún descuido nadie indague sus antecedentes. Otros apenas se están labrando un camino en la administración pública; buscan una oportunidad de mostrar lo que valen.

Lo que no deben ignorar los que deseen formar parte del nuevo gobierno es que el gobernador Yunes piensa explotar al máximo las cualidades de los elegidos, al tiempo que vigilará con lupa, no sólo las acciones de estos nuevos funcionarios, sino además las actitudes, que es donde se reflejan las verdaderas intenciones.

Desde que Yunes Linares tomara la decisión de contender por la gubernatura de Veracruz, sabía que la tarea sería ardua. Primero, porque para ganar la elección, debió realizar una campaña desgastante por la cantidad de infamias que tuvo que soportar. Pero una vez elegido gobernador por los próximos dos años, Yunes Linares entendió que la campaña sólo fue un juego de niños comparado con el reto que le espera. Veracruz, ya lo dijo Clementina Guerrero, es un estado quebrado. La casa está en ruinas y lo primero que hay que hacer es levantar el tiradero para comenzar a edificar de nuevo. Le espera a Yunes Linares un reto como nunca se había visto en la historia de este país. Veracruz quedó como si 20 terremotos del 85 lo hubieran sacudido.

Es por eso que aquellos que busquen chamba en el nuevo gobierno deberían pensarlo dos veces, sobre todo si su idea es lucrar como lo hicieron los funcionarios de las tres administraciones anteriores. Si Miguel Ángel Yunes Linares desea que el suyo sea un gobierno del cambio, deberá dejar muy claro a su equipo que no se permitirán los vicios que corrompieron a la administración pública en Veracruz.

Que el gobernador Yunes Linares no desperdiciará ni un solo segundo como gobernador, lo indica el hecho de que en el primer minuto del 1 de diciembre, tomará posesión de la gubernatura, iniciando una etapa nueva en la historia de Veracruz. Atrás quedan más de 80 años de gobiernos priistas que culminaron de muy mala manera con un sujeto enfermo de codicia que nunca debió pisar el Palacio de Gobierno.

Algunas personas se preguntan si el nuevo gobernador cumplirá todo lo que prometió; algunas personas creen que como candidato Miguel Ángel Yunes Linares creó demasiada expectativa; algunos piensan que no le dará tiempo de cumplir todo eso que prometió. A otros no les queda duda de que el siguiente será un gobierno mejor, eso ante la lógica de que peor no podríamos estar.

Poco a poco Yunes Linares ha ido cumpliendo lo prometido. En primer lugar, y gracias a las denuncias y a la documentación que entregara a la PGR sobre los prestanombres de Javier Duarte, se le pudo fincar a éste una denuncia por delincuencia organizada. Eso no lo hizo ni el Bronco en Nuevo León, quien equivocó la estrategia en contra de Rodrigo Medina y por ello es que el exgobernador de Nuevo León sigue libre. La tarde del martes la PGR reconoció que gracias a la información entregada por el gobernador electo es que se podrán recuperar 450 millones de pesos de los mucho que se robó Duarte. Son muchas las expectativas creadas por el nuevo gobierno. Esperemos que las cumpla. Sin embargo Veracruz necesita del esfuerzo de todos para sacar adelante el estado.

En lo que toca a los medios, lo mejor que podemos hacer es mantener nuestra postura crítica. Lo peor que podríamos hacer por este nuevo gobierno es aplaudir todo lo que haga, sin importar si es bueno o es malo. El nuevo gobernador no tiene el don de la infalibilidad, bueno ni el Papa tiene ese don.

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