Señor presidente, no está usted perdonado

Bola
Enrique Peña Nieto

RetornoLa promulgación de las leyes anticorrupción que anunció el presidente Enrique Peña Nieto, pasará a la historia como una cortina de humo que no tuvo ningún impacto en la vida de los mexicanos. La simulación, el querer guardar las apariencias, el burdo y ridículo perdón presidencial, quedará en el imaginario social como un burdo recuerdo en la mente de miles de mexicanos que se siente agraviados.

No es fácil olvidar la cínica presencia de su esposa la Gaviota tratando de explicar que esa casita (con la venta de esta se podrían comprar 150 casa de interés social), era fruto de su meritito esfuerzo trabajando para la empresa Televisa.

Que alguien le diga a este inquilino de Los Pinos que cuenta con el perdón de los mexicanos, siempre y cuando les pida a sus funcionarios que devuelvan lo que se han robado. Claro que tendrá el perdón de los mexicanos si logra poner un tope a los vergonzosos salarios de los ministros de la Suprema Corte de Justicia y de sus diputados y senadores.

Claro que tendrá el perdón de los mexicanos si públicamente le pide perdón a la valiente periodista Carmen Aristegui y la reinstala junto con su equipo de trabajo. Y es que este señor debe entender que no es suficiente con pedir perdón, es necesario un cambio de actitud del agresor y resarcir el daño.

Cuando Peña Nieto cumpla a su palabra, cuando le ponga un tope al incremento de la gasolina, entonces los mexicanos, comenzaremos a considerar si le otorgamos un perdón colectivo. Por el momento, señor presidente, no lo perdonamos.

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