Filiberto Vargas Rodríguez / Javier Duarte buscó en la capital del país la caja de resonancia que no encontró en Veracruz.
El Gobernador concertó una amplia entrevista con el periódico El Universal, en la que dijo lo que ya había repetido en múltiples ocasiones en territorio veracruzano, sin que tuviera el menor efecto en los medios de comunicación y, mucho menos, en la sociedad.
En México sus declaraciones fueron la nota principal del medio impreso.
Aunque el tema central de la entrevista era el caso del múltiple homicidio de la colonia Narvarte, la oportunidad era perfecta para refutar los señalamientos en el sentido de que Veracruz es el estado más peligroso para ejercer el periodismo y de que el gobierno de Javier Duarte es el responsable de ello.
El mandatario veracruzano volvió a hacer referencia a que la entidad que él gobierna es la que más periodistas tiene, es la que más medios de comunicación contabiliza, lo que en su opinión contradice el supuesto estado de alerta en el que vivirían los comunicadores.
Hizo referencia a los homicidios de periodistas que se han registrado en la entidad. Dijo que son 12 y que en ocho de ellos la Procuraduría General de la República (PGR) decidió atraerlos, pues se presume la participación de la delincuencia organizada.
En ninguno de los casos, dijo, existen antecedentes de que los periodistas fallecidos hayan realizado críticas a su gobierno, por lo que no se configura una presunta represalia.
Sobre los otro cuatro casos, que sí quedaron a cargo de la Fiscalía General del Estado, dio a conocer que tres de ellos ya fueron esclarecidos, se encuentran personas detenidas, y en algunos casos ya sentenciadas, en otros ya próximos a recibir sentencia, con autos de formal prisión. Sólo el caso más reciente, el sucedido Orizaba, sigue en proceso de investigación.
Sobre el homicidio múltiple de la colonia Narvarte insistió en que no le preocupa en lo absoluto, pues nada tuvo que ver; dijo que conocía al fotógrafo Rubén Espinoza y que nunca se sintió incómodo por las fotografías que le tomó. De Nadia Vera aclaró que nunca la conoció.
Advirtió Javier Duarte que el homicidio en la colonia Narvarte tiene mayor peso mediático en la capital del país que en el estado de Veracruz.
La contundencia de la información emanada de la Procuraduría de Justicia del Distrito Federal parece darle la razón al Gobernador veracruzano. La línea de investigación que supone una posible vinculación de autoridades de esta entidad con el crimen es cada vez más endeble, mientras que se confirma la teoría de que el crimen tuvo que ver con el narcomenudeo y la delincuencia común.
Ya han sido capturados tres de los sujetos que al parecer participaron en el crimen. Las versiones de todos ellos se contradicen, pues queda claro que pretenden evadir su responsabilidad y culpar a los otros de los homicidios.
El último en ser detenido, Omar Martínez Zendejas negó que haya estado presente en el sitio del crimen el día de los hechos. Sin embargo, las investigaciones y peritajes de la Procuraduría Capitalina, demuestran que sí estuvo ahí.
Martínez Zendejas dijo que es diseñador gráfico, que gana de entre 20 a 25 mil pesos mensuales y que de los otros dos detenidos sólo conoce a Abraham Torres Tranquilino, pues con Daniel Gutiérrez Pacheco, no tenía relación alguna, pero le encontraron tres teléfonos celulares, en uno de los cuales aparece un depósito bancario de ScotiaBank que le hizo a Daniel Pacheco Gutiérrez.
Aunque dijo no haber estado en el sitio del homicidio, los peritos lo identificaron en los videos de seguridad del edificio y de negocios aledaños, además de que las huellas encontradas en el departamento de la colonia Narvarte coinciden con las de unos tenis que él usaba al momento de su detención.
Como bien dice Javier Duarte, hay otros temas en la entidad que deben preocuparle más que lo sucedido en la ciudad de México.
Todos sabemos cuáles son.
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